El Conejo Virgilio es el símbolo de Trudi, y por eso contiene toda la dulzura y el cuidado a los detalles de la marca italiana.
Caracterizado por patas grandes y orejas largas, transmite una simpatía abrumadora que se ve reforzada por sus inconfundibles grandes dientes.
Tiene un pelaje de primera calidad y dos grandes ojos negros que derriten todos los corazones.